3.7.23
Usada
6.6.23
¿Será?
28.4.23
Lo que escapa a tu campo de visión
23.1.23
(Cuarenta)
Se dice que el sentido de la vida, el universo y todo lo demás es el número 42.
Hoy cumplo 40, siempre a unos cuantos dígitos de la perfección, en unas pocas horas según mi acta de nacimiento (sí, mi acta de nacimiento original aún tiene mi hora de nacimiento) mueran de envidia milenials pro horóscopo.
Por alguna razón vuelvo aquí a escribir el recuento de los daños de cada etapa de mi vida o las etapas traslapadas entre sí, mis errores y los errores y los aciertos de cada unx de mis terapeutas o de cada pensamiento, ó de cada recuerdo, ó de cada vez o cada yo... que algo marca tanto. Es y ha sido el único blog que no he borrado a lo largo de todos estos años desde un 2002.
También concuerda con la edad con que mi sobrino ha dicho que era suficiente vivir.... por alguna razón yo aposté por el 34 en vez del 24 desde que era una infante... m entristece creer que la paciencia también ha caído por los suelos. Lo curioso es....
Que puedo decir, los últimos 10 años han sido de los más interesantes de mi vida, incluidos los extras a los que creí serían suficientes aún a pesar de la pandemia y de el desplome total de las finanzas propias y familiares.
No sé cómo vivir pero he decidido seguirlo sin ayudar a quienes nos oprimen.
3.12.18
Genesis
22.11.12
Apología de las cosas pequeñas y tontas
Moría solo por un abrazo y un te quiero honesto.
Alimentaba a una piedra con sumo cuidado de no caer dentro de sus pensamientos, era una piedra pequeña que con el tiempo fue creciendo, que se llamaba Pietro y venía de un rió, tenía tres rostros, uno neutro, uno de risa y uno triste (no olviden el triste). Le alimentaba cada mañana extrayendome algo de vida por la nariz, con gotitas de mi sangre que dejaba escurriendo por el filo de una aguja fina con la que mi abuela remendaba las camisas de mi abuelo.
Esperaba años a que se volvieran fruta vieja, los dejaba pudrirse en una habitación con sus propios orines y con su caca embarrada en los pantalones mientras perdían la vista poco a poco. con el único afán de que pudiera comprender una pizca de lo que se siente. Como le fue pasando al abuelo...
¿Cómo se supone que los voy a amar después de todo eso?
Tengo nostalgia a veces de los murmurllos de mis parejas, de su amor o de los momentos en que parecía serlo, de como hacían para escapar a hurtadillas de la cama, de sus muecas al llegar el orgasmo, de su manera de mentir, de como en sus manías tenían que dar tres vueltas a la manzana antes de ir a dormir (como gatos o perros); de mil y un cosas tontas, bien tontas y que despiertan mi afana materno-paterno; un... un... mapa del sentimiento que hubiera querido para mi. En vez de estos pensamientos negros en los que el ácido del tiempo y el olvido termina por corroer la piel de mis progenitores.
En alguna parte tengo una idea de lo que puedo ser. Me veo de niño y me presto mis alas, por que mis alas existen. Por que no estoy solo, por que estoy conmigo. En alguna parte no soy la medusa que convierte en mierda y piedra a todo el que lo "ama" o al que "ama".
Defiendo no ser eso. ¡NO! ¡No quiero! Apuesto a querer ser algo, cualquier cosa distinta a lo que había venido siendo. Prefiero mi risa estúpida en un quinto piso, muerto de hambre, a seguir viviendo otros 30 años de mierda.
1.7.12
Curas de rabia (Final -con beso-)
Hoy amanecí muy Agustín Lara. Lloroslola como algunolos días nóstalgicos, comlo os muchos otrolos. Supongo es la mia naturalezala destructiva .... Jurolo que esta no soy yo, que me cambiaron en algunolo momento y algún olo algolo se me le llevo la felicidad mia consigolo.
Perhaps.
Besos.